miércoles, 10 de diciembre de 2014

Los 10 mandamientos

Definición:- Los Diez mandamientos, también conocidos como el Decálogo, son un conjunto de principios éticos y de adoración, que juegan un papel importante en el Judaísmo y el Cristianismo. Incluyen instrucciones como adorar sólo a Dios y guardar el día de reposo; como también prohibiciones en contra de la idolatría, asesinato, robo, deshonestidad y adulterio. Diferentes grupos religiosos siguen diferentes tradiciones en cuanto a la manera de interpretarlos y enumerarlos.
Los Diez mandamientos aparecen dos veces en la Biblia hebrea, en los libros de Éxodo y Deuteronomio. De acuerdo a la historia narrada en el libro de Éxodo, Dios escribió estos mandatos en dos tablas de piedra, las cuales dio a Moisés en el Monte Sinaí. Según el relato, cuando bajaba del monte, vio al pueblo que estaba adorando un becerro de oro y enfurecido las rompió. Posteriormente, pidió a Dios que perdonase al pueblo y sellase con él un «convenio» (pacto o alianza). Entonces, el Señor ordenó a Moisés que tomara dos lajas de piedra, y en ellas quedaron escritos los Diez Mandamientos del pacto, reconviniéndole que «no deben tolerar la desobediencia».
  


Mandamientos: 
 No cometerás adulterios                             
1    No tendrás dioses ajenos delante de mi                                                                                    No adoraras imágenes
           No tomaras el nombre de Dios en vano
4      Acuérdate del día de reposo para santificarlo
5      Honra a tu padre y a tu madre
       No mataras
7      No robaras
9      No mentira                                                                                                                               No codiciaras nada de tu prójimo
                                       



No cometerás adulterios

Dios se propuso que la relación sexual entre un esposo y una esposa sea un vínculo exclusivo e íntimo para fortalecer la relación matrimonial.
El relato de la creación muestra el maravilloso propósito de Dios para hombres y mujeres y para el vínculo matrimonial. “Y dijo el Eterno Dios: No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él.…
“Entonces el Eterno Dios hizo caer sueño profundo sobre Adán, y mientras éste dormía, tomó una de sus costillas, y cerró la carne en su lugar. Y de la costilla que el Eterno Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre.
“Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamad Varona, porque del varón fue tomada. Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne” (Génesis 2:18, 21-24).
Por lo tanto la prohibición del sexo extramarital—adulterio—fue diseñada para proteger la santidad del matrimonio y mostrar la importancia de la fidelidad.